La seguridad alimentaria es el desafío del siglo, o tal vez del milenio, para la agricultura y todos los sectores de la sociedad
Imagine tener el costo de la producción agrícola triplicado en función de la incidencia de malas hierbas resistentes. Pense en la cultura de la soja en Brasil, por ejemplo, donde los estudios de la Embrapa - Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria - estiman la elevación de los costes productivos del 42% al 222% por hectárea gracias a este problema.
En la cosecha 2016-2017, la producción mundial de uvas alcanzó los 75,8 millones de toneladas, de acuerdo con la International Organisation of Vine and Wine (OIV). De los 7,5 millones de hectáreas cosechadas, el 36% fue de uvas de mesa y el 47% de uvas para vino (el restante fue de uvas secas y para jugos).